Construcciones Rubio Morte S.A., se constituyó en Febrero de 1982 como continuación de una empresa individual propiedad de D. José Miguel Rubio Morte, a su vez sucesor de D. Modesto Rubio Gracia. En la actualidad, la empresa, con una experiencia acumulada de más de 40 años, se encuentra dirigida por la tercera generación: Doña. Gema Rubio Peinado y D. José Miguel Rubio Peinado.

El ámbito de actuación de la empresa se distingue por sus tres especialidades: Obra nueva y civil de calidad, restauración de bienes muebles e inmuebles Histórico Artísticos y servicios de mantenimiento de edificios, industrias y monumentos.

Construcciones Rubio Morte S.A., cuenta entre su principal valor añadido, su equipo humano.

Un equipo, tanto directivo, técnico como operarios de obra, altamente cualificado y en formación continua, plenamente comprometido con el trabajo de calidad.

Es por ello, que cuenta con una gran mayoría de plantilla fija, especializada, y basada en la promoción dentro de la propia compañía.

Construcciones Rubio Morte S.A. está asociada a ARESPA, Asociación Española de empresas de Restauración del Patrimonio Histórico y a AEERPA, Association Europeénne des Enterprises de Restauration du Patrimoine Architectural, entidad que agrupan a nivel español y europeo, respectivamente, empresas de profesionalidad contrastada en nuestra especialización.

Restaurarlo

Socios fundadores de ARESPA, Asociación Española de Empresas de Restauración del Patrimonio Histórico, y socios de AEERPA, entidad que agrupa a nivel europeo empresas de profesionalidad contrastada de nuestra especialización.

Crearlo

Desde nuestros comienzos apostamos por una construcción de calidad, basada “en nuestro saber hacer” y con el criterio de “las cosas bien hechas”, en definitiva, por la “creación de patrimonio”.

Conservarlo

Inherente a la filosofía de Rubio Morte, el mantenimiento correctivo y sobre todo el preventivo es la base del incremento de valor de un buen patrimonio, ya sea industrial, monumental o urbano. El mantenimiento bien planificado evita costes futuros y aumenta el valor constante del bien.